Cada día más gente se engancha a la filosofía del entrenamiento para correr una maratón. Prepararse para esta carrera de 42 km exige ganas, concentración y disciplina. Los beneficios de entrenar son el principal objetivo que debe de tener todo runner y, para conseguirlo, es fundamental la manera de ejercitarnos y de alimentarnos. Solo haciendo las cosas muy bien obtendremos unos buenos resultados.
Si estás pensando en unirte a los maratonianos, te damos algunos consejos para que tu entrenamiento sea eficaz y puedas ir mejorando tu tiempo personal. De esta manera, podrás disfrutar de cumplir con tus objetivos, de dotar al cuerpo de un estado de forma increíble y de correr rodeado de un ambiente inmejorable.
Primero, ve al médico y pide que te haga un chequeo general. Para comenzar a entrenar debes conocer cuál es tu estado físico y tener en cuenta tus objetivos, pero también tus limitaciones. Los beneficios de correr son muchos y muy variados si se hace bien; de lo contrario, podrían surgir problemas inesperados que ralenticen tu progresión provocando que lo que debería de ser un placer se convierta en una frustración.
La segunda clave para entrenar una maratón es tener ganas. Muchas. Aunque esto parezca una obviedad, no lo es tanto, puesto que las ganas deben de ir acompañadas de una voluntad de hierro y un entrenamiento disciplinado, pautado y exigente.
La situación ideal es que lleves un tiempo corriendo con regularidad y estés familiarizado con el esfuerzo, pero si no es tu caso, tampoco te preocupes. Intenta correr a tu ritmo y márcate un mínimo de kilómetros a la semana. Estaría bien que comenzaras por salir tres veces a la semana realizando una media de 50-65 kilómetros. Este entrenamiento es el ideal para conseguir que tu marca personal sea de un tiempo aproximado de cuatro horas. Si tu objetivo es más ambicioso y tu estado físico es óptimo, siempre puedes aumentar las horas y los kilómetros.
La preparación debe consistir en correr combinando cambios de ritmo, entrenamientos fraccionados y trotes durante largo rato. Para correr una maratón hay que entrenarlo todo: la fuerza, la potencia, la elasticidad…
Entrenar para una maratón nos va a exigir meses de ponernos las deportivas y salir a correr con viento, lluvia o bajo un sol de justicia. Al principio será duro, pero, a medida que vaya pasando el tiempo, notarás los beneficios físicos y psíquicos.
Es necesario saber que solo notarás los beneficios de correr si tu alimentación es equilibrada. De nada sirve entrenar si luego nos alimentamos de comidas con exceso de grasas o de azúcar, si comemos de forma desordenada o si no hacemos cinco comidas al día.
Corriendo quemaremos principalmente grasa. Esta quema de grasa no solo se producirá durante el entrenamiento, sino que se mantendrá a lo largo del día manteniendo activo nuestro metabolismo. El cuerpo permanecerá activo incluso durante tus momentos más sedentarios, tu corazón latirá de manera más eficiente y tus huesos se fortalecerán. Merece la pena, ¿no?
Debes compensar el desgaste físico que supone el avituallamiento con alimentos de buena calidad nutricional, es decir, hidratos de carbono de cadena larga, fibra, grasas saludables y muchas vitaminas y minerales.
El aporte de hidratos de carbono que tendrás que darle a tu cuerpo antes y después de los entrenamientos será vital para evitar pequeños dolores, tener energía y evitar las famosas “pájaras” que dan por un descenso de azúcar en sangre. Tanto si quieres algo rápido antes de entrenar como si lo que necesitas es recargar energía tras el entrenamiento, comer una manzana de tu gama favorita de Livinda es una opción saludable que además no está reñida con disfrutar de los alimentos más dulces y cotidianos de nuestras vidas. Si deseas conocer más consejos de cómo alimentarte en cada etapa del entrenamiento, lee nuestras pautas de qué comer cuando se entrena.
Mejorar el tiempo personal es uno de los objetivos de todo corredor de maratones, pero no olvides que, tal y como dice la expresión, es muy personal. Tras haber entrenado durante meses y conocer tus puntos débiles y tus limitaciones, podrás mejorar tus marcas. El secreto para lograr esta mejora es ser consciente de que no existen varitas mágicas: incrementar poco a poco el tiempo de entrenamiento y los kilómetros recorridos es la única opción realista.
Sin embargo, sí que hay algo muy importante para llegar antes a meta: haber disfrutado lentamente de todos y cada uno de los pasos recorridos. Todo buen deportista sabe que disfrutar del entrenamiento es una de las claves para lograr los objetivos. Vaciar la mente y llenar la autoestima. Por eso, la clave más importante de todas para correr un maratón, como para correr cualquier carrera que nos ponga por delante la vida es: buena nutrición, buena hidratación y felicidad por hacer lo que estás haciendo.